Yo... yo quiero a alguien con quien pueda ser simplemente yo; sin pretensiones de ningún tipo, máscaras ni caretas. Alguien que sienta que puede ser él mismo conmigo, sin fingir absolutamente nada. Alguien a quién prepararle el desayuno todas las mañanas, con quien yo me sienta lo suficientemente segura como para poder ser sumisa y entregada sin sentir que pierdo libertad u orgullo.
Que me cuente todo lo que me quiera contar, desde las historias más torpes hasta sus pensamientos más profundos.
A quien le pueda leer mis poemas, que le pueda cantar al oído, que le pueda hacer piojito hasta que se quede dormido. Alguien que quiera pasar una tarde de domingo a mi lado, recostados, abrazados mientras escuchamos música.
Quiero a alguien cuyo silencio y voz estén llenos melodía. Que tenga la luz indicada en la mirada, que sin importar lo malo que ha sido mi día, mi semana, mi mes, mi año, sin importar lo mal que esté el mundo afuera y dentro de mí, con sólo mirarlo a los ojos sepa que todo, absolutamente todo tiene solución, respuesta o salida.
Alguien que con un beso pueda hacerme llorar, que me deje tocar su cabello, que me tome de la mano, que se sonroje cuando reciba un cumplido, que tenga lo que ya pocos tienen: humildad.
Busco a alguien que pueda ser un tonto conmigo, un inmaduro, un loco, un niño.
Que no tenga miedo de ser sensible, de desahogarse, de hablar de lo que le preocupa y de sus miedos. Busco a alguien con quien me pueda sentir cálida por dentro, como si él fuera mi hogar, mi luz, paz en mi vida.
Alguien en cuyas pecas y lunares pueda ver a las mismísimas estrellas, formar constelaciones y planetas. Alguien cuyo cabello baile al viento, que crea en el amor y en el cielo. Quiero a alguien con quien pueda ir a gritar a una pradera, abrazar un árbol y besar bajo la lluvia. Alguien que pueda pisar el pasto y sentir que pertenece, junto conmigo, a esta tierra.
Alguien para mirar al cielo, contar estrellas, que me lea un libro en la terraza mientras tomamos café. Que con un abrazo me haga sentir que estoy en casa, que a él pertenezco, que de él soy. Que pueda voltear a mirarlo y preguntarme a mí misma "¿Qué de bueno habré hecho en la otra vida para merecerlo?".
Alguien que esté tan loco por la música como yo, que entienda mis silencios y ambos nos entendamos nuestros defectos y errores. Busco a alguien para cantar las mismas canciones y bailar los mismos pasos, alguien que se quiera quedar un sábado en casa a jugar vídeo juegos, a comer pizza y beber un par de cervezas.
Que quiera viajar y recorrer carreteras, alguien que me ayude a crecer, a soñar, que me ayude a dejar de ser una egoísta y me ayude a ser tan alegre como cuando era niña.
Alguien lleno de ideales y pasiones. Alguien por quien yo me trague el orgullo y el ego. Alguien que me haga bajar la guardia.
Sé que busco mucho, demasiado, pero también sé que por allí debe haber un loco que busque lo mismo que yo.
Ojalá nos encontremos.
